Destino: Japón

lunes, 11 de julio de 2011

Hello Kitty llega a Tokio

Hello Kitty es más que un icono en Japón, casi sienten adoración por esta pequeña muñeca. Quizás por ello Swarovski ha colaborado incrustando sus famosos cristales en un gran número de accesorios. Durante una semana, distintas representaciones de Hello Kitty se han metido en grandes urnas de cristal y exhibido a lo largo de la calle Omotesando dando al bienvenida a la “La casa de Hello Kitty”.

La casa se ha construido en el complejo de Omotesando Hills, montaje a juego con el encanto y diseño del resto de las tiendas de dicho complejo. El resultado es lo que ahora os muestro:

El diseño "más coqueto"


La más sosa de las representaciones



La más simpática



Diseño de Azuma Makoto, un conocido artista floral. Le faltaba la margarita en la cabeza 



Diseño de Rikako Nagashima, un famoso director de arte en Japón 



Como podéis ver, la exhibición se anunciaba por todo Omotesando, así que fui esperando ver qué montaje habían preparado, viniendo de los japoneses seguro que algo espectacular
 
 
 

A la entrada de la exposición, una hilera interminable de diminutas Hello Kitty metidas en el mostrador. El ambiente prometía, la verdad es que no había menos de 10 personas dedicadas a la exposición. Todos chicos, vestidos de traje negro y máscara blanca, como "El fantasma de la Ópera", me pareció curiosa ambientación.


Una gran pantalla como un gigantesco holograma daba la "bienvenida". Todo el ambiente era rosa. Un poco freaky



Dentro de este gigantesco........no sé, ¿cojín?, se abría un pequeño escenario en el que un grupo de Hello Kitties subían y bajaban al compás de la música



Cada dos minutos había una representación nueva. Resultó gracioso verlas "danzar"



Y aqui las artistas de la función


En mitad del recinto una enorme lámpara diseñadas por el artista de traje japonés Hibino Kozue.


Ponerse en el medio y mirar hacia arriba hacia un efecto raro, casi de alucinógeno, después de 30 segundos estaba mareada



Cada una de sus hileras estaba formada por una cascada de Hello Kitty.




Me alejé buscando "La casa de hello Kitty" con sus habitaciones.




La estrella de la colección con 20.000 cristales, está valorada en ¥1.2 millone ($14.800)...casi nada.





La segunda estrella de la colección, en edición limitada solo costaba $100,000. Asequible como bolso de fiesta



Y aquí siguen las habitaciones "de la casa" en cada uno de los recintos, se desplegaban diferentes piezas de la colección. Sinceramente, me parecían un pastel todas ellas. Las japonesas andaban locas pegando grititos de emoción, señalaban como locas que querían algunas de ellas.




 
































Y hasta aquí llegaba lo expuesto en las diferentes "habitaciones"

Al lado de la casa, una pequeña habitación de ositos de peluches. La gente probaba suerte para poder coger algunos de los peluches. De lo que recuerdo de mi infancia, era bastante difícil coger cualquiera de las piezas, parecía que las pinzas estaban trucadas.



Parte del personal de la exposición. Así iban vestidos todos ellos caracterizados como el fantasma de la ópera



 Y como despedida, dos torres separadas de hologramas en 3D: hello Kitty y sus joyas.....demasiado 



Se vendían replicas de algunas de las piezas. La verdad es que los precios eran escandalosos. La buena noticia, es que una vez terminada la exposición, todos y cada uno de los objetos se subastarán y el importe total de la recaudación se donará a la Cruz Roja como ayuda para los damnificados del terremoto del pasado 14 de Marzo 

El el final de la exposición, la cama de Hello Kitty. No me queda claro el motivo por el que un peluche tan pequeño necesita semejante cama.

No pude resistir fotografiar (con disimulo) a esta japonesa, una de las que pegaba grititos. Se fue con dos peluches, el lacito ya lo traía cuando llegó. Son tan graciosas.



¿Os sentís un poco rosa?


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